Cuando uno de nuestros hijos estaba estudiando en clase al Arcipreste de Hita (el del Libro de Buen Amor) y, para ayudarle a relacionar lo que aprende con algo más real para él, decidimos hacer una excursión a Hita, lugar de nacimiento de ese autor y un pueblo medieval precioso de la provincia de Guadalajara. Nos fuimos un domingo, pasamos allí la mañana y comimos en uno de los restaurantes que estaban abiertos.

Hita está a unos 85 km de Madrid y no es muy grande, pero, cuando te vas acercando por la carretera, lo ves al pie de un cerro en cuya cima aún quedan las ruinas del castillo, lo que ya nos da pistas de que no es un pueblo cualquiera. Lo ideal, para verlo en su salsa, es venir en plenas fiestas medievales, a principios de julio, porque entonces sí que está lleno de gente. Un fin de semana cualquiera sus calles son tranquilas y casi silenciosas.

Antes de nada, debéis saber que Hita fue en el siglo XV una población importante, regida por Iñigo López de Mendoza, primer Marqués de Santillana, y que aquí, por su apelativo, tuvo su origen también Juan Ruiz, Arcipreste de Hita, autor de uno de los grandes libros de la literatura española, el que marca el paso de la Edad Media a una cierta modernidad previa al Renacimiento: el Libro de Buen Amor. Es un canto al hombre como centro del universo, a sus emociones y a la exaltación espiritual y carnal de las relaciones amorosas.

Qué ver en Hita

Sólo dar un paseo por esta población medieval ya es un plan fantástico, pero podéis completar este paseo con otras visitas. Os contamos lo que podéis ver con vuestros hijos si hacéis una excursión a Hita.

Casa Museo del Arcipreste de Hita

Nada más llegar, buscad la Casa Museo del Arcipreste de Hita (preguntad a cualquiera por la calle, la gente es muy amable y están encantados de recibir viajeros. En ella está la oficina de Turismo, donde podéis informaros de lo que podéis visitar, con su emplazamiento y sus horarios. Si vais a quedaros a comer allí, también os contarán qué posibilidades tenéis. El museo es una mezcla de varias cosas: restos arqueológicos que hablan del origen de Hita, una sala dedicada a la etnografía de la zona (enseres cotidianos, aperos de labranza, reproducción de rincones de una casa…), una sala dedicada al Libro de Buen Amor y a su autor (con facsímiles de sus páginas, reproducciones de obras de la época, información sobre Juan Ruiz…) y otra dedicada a las fiestas medievales, que son el gran atractivo turístico veraniego. Sus horarios son los siguientes:

• De lunes a jueves, de 10:00 h. a 14:00 h.
• Viernes a domingos y festivos de 10:00 h. a 14:00 h. y de 16:00 h. a 20:00 h.

Muralla y Puerta de Santa María

Hita tuvo muralla, sí, construida en 1441 por orden del Marqués de Santillana. En realidad, no debió de tener muchos enemigos esta población, porque se sabe que aquí vivieron en paz cristianos, judíos y musulmanes. Pero estaba en zona de reconquista y había que tener el entorno bien vigilado. Según textos de la época, tuvo 3 puertas y 10 torres.

Desde el castillo, esa muralla bajaba y abrazaba toda la población rodeándola con sus almenas. Hoy se conservan algunos tramos, incluso con algunas torres (todo restaurado), pero, sobre todo, ha pervivido la llamada Puerta de Santa María, que se ha convertido en el símbolo de Hita, con un arco apuntado para atravesarla y, en su exterior, dos garitas colgantes. Mirad por fuera, sobre el arco hay labrado un escudo: es el de la familia Mendoza.

Plaza del Arcipreste de Hita

Es la plaza mayor del pueblo, formada con casas y con soportales, y también con algunos paños de la muralla que aún se conservan. Como principal salida, el arco de Santa María del que hablábamos antes.

Iglesia de San Juan Bautista

Es la iglesia del pueblo, construida en gótico mudéjar. Si podéis, echad un vistazo a su interior, sobre todo a su techo en forma de artesonado (como si fuera una artesa de madera pintada puesta al revés, por eso se llama artesonado). La pila bautismal, el coro y unas pinturas que muestran el descendimiento de la cruz son los otros elementos interesantes de esta iglesia, que, por cierto, está ya subiendo hacia el castillo, en la parte alta de Hita.

Ruinas de la Iglesia de San Pedro

Hasta la Guerra Civil española, Hita tenía dos iglesias, la de San Juan y la de San Pedro, pero esta última fue destruida y hoy sólo quedan sus ruinas. Uno de los arcos y algunas lápidas muestran aún la importancia que tuvo en siglos pasados.

Bodegas y bodegos

Sí, bodegos, no nos hemos equivocado al escribir. En el subsuelo de Hita hay otro Hita, formado por una auténtica arquitectura subterránea, parece que de origen judío y usada hoy como bodegas repletas de tinajas de vino. Además, subiendo hacia el cerro del castillo, veréis numerosos huecos que la gente del pueblo usa para cobijar animales, además de otros que han caído en el abandono. Esos son los bodegos.

Festival medieval

En circunstancias normales, sin crisis sanitaria, se celebra en julio en una zona de Hita conocida como El Palenque. Son unas fiestas en las que el pueblo se transforma y se traslada en el tiempo hasta la Edad Media: los vecinos se vissten de época, un mercado medieval llena las calles, hay actuaciones de juglares, bufones y malabaristas, se celebran torneos y justas a la manera del medievo… Al anochecer, en la Plaza Mayor, tiene lugar una representación teatral.

Monasterio de Sopetrán

Estas ruinas están a las afueras del Hita y son de origen visigodo. Dentro aún se puede ver el claustro y algunas naves de lo que fue el monasterio, junto a algunas partes de la iglesia y la antigua sacristía. Da un poco de reparo acercarse demasiado, porque te da la impresión de que algo más se va a derrumbar de repente. Pero, claro, tienen la belleza de los lugares que, a pesar de todo, nos llevan a tiempos pasados.

Fotos de Hita, en Guadalajara

De cuando visitamos Hita en familia tenemos algunas fotos que queremos compartir con vosotras para que os hagáis una idea de cómo es esta preciosa población medieval en la provincia de Guadalajara:

Dónde está Hita

Es fácil llegar a Hita siguiendo la A-2, en este mapa podéis consultar su situación exacta.

Como os comentábamos un poco más arriba, fuera de las fiestas medievales o de la temporada estival, Hita cuenta con una población de unos 300 habitantes, por lo que se hace ideal para reicibir visitas familiares 🙂