En el centro de Madrid, a un paso de la Plaza de España, en lo alto de la escalinata que lleva al Cuartel del Conde Duque, una fachada surge más allá del jardín de la plaza de Cristino Martos. Es el Café Mür: en sus ventanas destacan ristras de luces que invitan a entrar y descubrir si el local es tan acogedor por dentro como sugiere por fuera. Y con nosotros, nuestros niños y unos amigos, que todos hemos oído hablar de sus exquisitas y variadas tartas, así que fuimos a catar y comprobar si la fama era cierta.

El Mür Café tiene dos plantas. En la de abajo, un poco inferior al nivel de la calle, se encuentra la barra, que tiene la función de expositor de tartas, variadas y a cual más atractiva (con solo mirarlas, se le hace a uno la boca agua), además de varias mesas con disposición y plazas distintas, una de ellas con un sofá que parece cómodo y te hace añorar una larga tarde de cafés y conversación.

La decoración del local alterna elementos metálicos, con piezas de mobiliario clásico y otras a base de materiales reciclados además de pequeños detalles aquí y allá (flores, pequeñas plantas, velas, piñas piñoneras…). En la segunda planta, ese mismo estilo y, ocupando el centro del espacio, una de esas grandes mesas comunitarias, como para diez personas, en las que uno se siente acompañado aunque vaya solo y, si forma parte de un grupo numeroso de amigos, no tiene que dividirse. De fondo, una suave música que envuelve el ambiente de cálida tranquilidad.

Fotos: merienda «casera» en el Café Mür, en el centro Madrid

En esta galería de fotos podréis apreciar el ambiente de una de nuestras primeras meriendas en Mür:

Quien nos acoge al entrar nos explica que la especialidad del local son las tartas caseras y la repostería para acompañar cafés y tés en desayunos y meriendas, pero también los pequeños platos y tapas y los brunchs que los domingos atraen a un público trasnochador o perezoso de madrugar. Al caer la tarde, el Mür Café se transforma en una coctelería capaz de prolongar las veladas tras una cena en cualquiera de los restaurantes de la zona.

Al entrar, se elige y se abonan las consumiciones; luego, el pedido será llevado con amabilidad y diligencia a la mesa por el personal del local, siempre atento a si el cliente ha quedado satisfecho de sus productos. Los propietarios son un grupo de amigos llenos de ilusión y de ideas para este proyecto que abrieron al público en las navidades de 2013 y que enseguidan agrandaron, en cuanto llegó el buen tiempo, añadiendo una terraza.

Los propietarios de Mür le ponen buen gusto y cariño a su local, y eso lo percibe la clientela, relativamente joven y cosmopolita, a la que se ve charlando relajadamente.

Los niños son bien recibidos (podemos asegurarlo, fuimos con cuatro) y disfrutamos la merienda y el compartir tres tipos diferentes de tartas (triple chocolate, zanahoria y Oreo) y dos tipos de café (suave y fuerte), todo muy recomendable, aunque lo mejor es dejarse llevar por lo que los sentidos os aconsejen. Los nuestros fueron claros en su veredicto: volvimos y llevamos a más amigos.

Dónde está Mür Café

Este local está muy cerquita de la Plaza de España, frente a la Plaza de los Cubos, pero no lo encontrarás «a pie de calle», sino que tienes, desde la calle de la Princesa, tienes que subir unas escaleras para encontrarte con él. En este mapa te señalamos la localización exacta de Mür Café:

Además del local interior, Mür Café cuenta con una terracita, tan acogedora como el interior, en la que cuidan la decoración de las mesitas y mantienen un serivicio con las mismas atenciones que en el interior, un espacio ideal para un desayuno o una merienda al sol en invierno, y a la sombra de la tarde en verano 🙂