En nuestro viaje de fin de semana al sur de Inglaterra, hace algunos años, aprovechamos para pasar una mañana en Salisbury. Aunque no es mucho tiempo, sí es suficiente para visitar su impresionante catedral, hacer una visita guiada por sus calles, conocer muchas curiosidades de la arquitectura de sus casas y edificios y pasear junto a sus ríos.
El día anterior, sábado, habíamos estado, por la mañana, en Stonehenge y Avebury y, por la tarde, en la increíble Bath y sus termas romanas. Todos estos lugares están bastante cerca unos de otros, así que en coche te mueves sin problemas. Nosotros aparcamos en el parking de un centro comercial junto a la zona de los canales y desde allí, paseando tranquilamente, nos dirigimos al centro.
Paseos guiados por Salisbury
Lo mejor es ir directamente a la oficina de turismo, que está a la vuelta de la esquina de la gran plaza del mercado, en la Fish Row. Allí, además de informaros de horarios y de los sitios más importantes que debéis visitar, podéis contratar algún paseo guiado (los hay en inglés y en otros idiomas, incluido el español), con un guía local, que viene muy bien para descubrir la ciudad.
Nosotros hicimos uno de esos paseos con guía, que nos llevó por toda la zona centro y nos enseñó la historia de Salisbury, aunque no era demasiado barato: 7,50 libras por persona. Duró unas dos horas y empezaba en la misma oficina de turismo para acabar junto a la catedral, que ya visitamos por nuestra cuenta.
Salisbury, la ciudad de los cinco ríos
Salisbury se encuentra en el condado de Wiltshire y en la confluencia de cinco ríos: cuatro por un lado —el Nadder, el Ebble, el Wylye y el Blourne— afluentes todos ellos del quinto, el río Avon (“Avon” es la palabra celta para “río”, por eso en Gran Bretaña hay tantos ríos con ese nombre). En una parte de la ciudad sus aguas forman como canales con puentecitos y aves (patos, cisnes) que resultan de lo más relajante para un paseo.
Es una ciudad de trazado medieval, con calles empedradas dedicadas a los diferentes gremios de pescaderos, carniceros… etc.. Justo en esas calles con nombres de oficios podéis ver el Poultry Cross, una especie de kiosco de piedra muy historiado y que marca el lugar donde estaba el primitivo mercado.
De aquella época datan esas preciosas casas con fachadas atravesadas por vigas negras de madera. Esas son las que más atraen nuestra atención, pero… atención, porque hay muchas otras casas igual de antiguas, pero camufladas de “modernas”. ¿Cómo? Te lo contamos.
Casas medievales de Salisbury
En vuestro paseo veréis muchas casas con fachadas que parecen hechas con finas tejas de piedra, que muchas veces han pintado además de color blanco o crema. Si os acercáis y observáis cómo están construidas en realidad, veréis que toda esa piedra no es más que eso, una cobertura, pero que debajo de ella está la fachada antigua (id a la esquina de la fachada y mirad de lado, porque veréis perfectamente las dos capas. En la galería de fotos os hemos incluido una imagen que lo muestra de forma clara.
Y un truco más: si quieres ver cómo era la estructura de esas casas medievales de Salisbury por dentro, hay una tienda junto a la plaza del Mercado especializada en ropa de montaña que ocupa una de esas casas y que ha conservado parte de la construcción interior. Se llama Cotswold, tiene la fachada blanca y roja y también la hemos recogido en la galería de fotos.
Un paseo por el centro de Salisbury debe comenzar en la plaza del Mercado o Market Place, con el edificio dedicado a los Gremios, el Guildhall, en cuyas salas se conservan importantes objetos relacionados con la historia de la ciudad, aunque hoy viene a ser el ayuntamiento y en él se celebran bodas y ceremonias civiles.
La Market Place sigue estando muy viva y celebrando un mercado semanal, aunque nosotros, como fuimos en fin de semana, no pudimos verlo.
Un edificio curioso que os aconsejamos ver es la posada del León Rojo (Red Lion), con un precioso patio y un interior que muestran cómo eran los pubs en la época. Hoy es un hotel de la cadena Best Western, pero en la Edad Media, y con el nombre de White Bear (el Oso Blanco) fue posada de los creadores de la catedral. En el siglo XVIII fue cuando recibió su actual nombre, pero conserva parte de su estructura medieval y tiene un patio muy agradable para tomar una cerveza o hacer un alto en el camino.
Catedral de Salisbury
Esta maravillosa catedral gótica es también conocida porque en ella se conserva la mejor copia de la Carta Magna, el documento legal que restringía los poderes del rey para hacérselos compartir con un consejo de nobles. Firmada por el rey Juan II (el famoso Juan Sin Tierra) en 1215, es un antecedente de lo que con el paso de los siglos llegaron a ser las constituciones democráticas.
En la catedral de Salisbury hay una parte -la Sala Capitular- dedicada a la Carta Magna, que está cobijada bajo una pequeña carpa, de forma que esté protegida de la luz y de los cambios de temperatura. Como españoles, no nos produce una especial emoción, pero a los británicos les llena de orgullo.
Además, en la catedral de Salisbury se puede admirar el reloj más antiguo de Europa. Nosotros llegamos allí a la hora de comer, así que tomamos el “lunch” en el autoservicio que forma parte de la catedral, que tiene el techo de cristal, como si fuera un invernadero, y te permite así comer mientras admiras las arquivoltas y los muros góticos.
En este enlace puedes consultar los horarios para visitar la catedral de Salisbury. El acceso a las torres es una entrada aparte. En este enlace puedes ver los horarios y los precios para subir a lo más alto de este gran templo de Salisbury.
Cuando te acercas, en el amplio césped que la rodea, verás una estatua de una mujer que camina. Acercaos: es la “Walking Madonna”, la virgen caminante, una original escultura de bronce de 1984 que simboliza la apertura de la iglesia hacia las necesidades de los seres humanos, simbolizada por la virgen María que deja la catedral para salir en busca de los creyentes.
Nada más entrar en la catedral, encuentras una pequeña exposición que explica cómo se construyó la catedral y que es muy didáctica para los niños (y también para los adultos), porque puedes ver y tocar los materiales con los que está hecha, las herramientas que se utilizaban, una maqueta de la catedral en obras con los diversos equipos de trabajo realizando sus labores… Esto es lo primero que hay que hacer para entender bien este edificio.
Aparte de eso (y de las torres y de todo el exterior), no olvidéis visitar: el reloj medieval (es de 1386 y ha hecho tictac más de 4,4 billones de veces), la pila bautismal de 2008 (es moderna, sí, está en mitad del crucero y, si os gusta la fotografía, permite un montón de juegos de luz, de reflejos y de perspectivas), la tumba de William Longespée (Guillermo Largaespada, la primera persona enterrada en la catedral y hermanastro de Juan II), el cruce de la aguja (mirad cómo el peso de la aguja y de la torre ha deformado las columnas), el coro, el magnífico claustro y… la Sala Capitular con el ejemplar de la Carta Magna.
Fotos de nuestra visita a Salisbury
Otras visitas que hacer en Salisbury
Aunque en una mañana no puedes hacerlo todo, si vais más tiempo a Salisbury, no olvidéis que podéis visitar el Mompesson House, el museo militar The Rifles Military Museum y el Museo de Salilsbury con su galería de Wessex. Muy cerca de la ciudad tenéis también Old Sarum, a dos millas al norte de la ciudad, un montículo con ruinas de lo que fue el origen de Salisbury y de su catedral.
Dónde está Salisbury
Se encuentra en el condado de Wiltshire, a unos 140 al sudoeste de Londres. En este mapa puedes ver la ciudad, con la referencia de la catedral y, al norte, el Old Sarum.
Queverenz comentó:
De todos estos bonitos lugares que recomiendas dentro de la ciudad, yo me quedo con el Museo de Salilsbury debido a que me encanta conocer la historia de los lugares que visito!
Gracias