La ingeniería y la construcción también son disciplinas que se pueden practicar en casa, y en estos días en que todas y todos debemos permanecer en casa, todas las ideas vienen bien para mantenernos ocupados. Montar un taller de reparación de juguetes, un taller de costura, un programa de cocina o hasta un festival de cine puede hacernos pasar grandes ratos en familia.
En este artículo os damos una idea para jugar a la construcción con un material muy especial…
En una ocasión, hace un par de años –por fin– descongelamos el congelador de la nevera de casa, en el que ya se había creado una capa considerable de hielo (esas cosas que sabes que tienes que hacer y que vas retrasando…). Las capas más gruesas resistieron hasta el último momento, así que a Miguel se le ocurrió que sería una manualidad divertida sacar esas placas con cuidado, dejarlas en la terraza, cortarlas con un cuchillo en pequeños trozos, como ladrillitos y… construir algo con ellas. ¿Y qué construcción puede adaptarse mejor a ese material que un igloo? Pues nada, dicho y hecho, llamó a los chicos y se pusieron manos a la obra.
He olvidado decir que estábamos en enero (por si leéis este post en un mes cálido) y la temperatura ayudaba a que el proyecto pudiera ponerse en práctica.
Fotos: construimos un igloo de verdad
En esta foto puedes ver la secuencia de la construcción de nuestro igloo en el balcón de casa, con hielo del congelador 😉
Tardaron un ratito en cortar todos los ladrillos de hielo y, cuando los tuvieron listos, empezaron la construcción: primero un círculo de base y luego hileras sucesivas, cada vez más estrechas, hasta que sólo quedó un agujerito en el techo. Eso fue lo más difícil, porque el “tapón” del igloo no acababa de quedar sujeto. Al final lo consiguieron. No es que les haya quedado perfecto, pero se rieron tanto haciéndolo que pensé que un plan tan espontáneo, que recicla un elemento natural, que se puede hacer en casa y que tiene coste cero ¡bien merecía este post! Espero que os haya gustado ;-)))
Este vídeo sobre Cómo construir un igloo en Navacerrada, en la Bola del Mundo, es el mejor, aunque dura 16 minutos.
Y, si no os ha parecido suficientemente interesante o no os habéis hecho bien a la idea de cómo fue su construcción, os aconsejo que echéis una ojeadita a este vídeo de Cómo construir un igloo de verdad. Está en inglés, pero aquí tenéis otro sobre Cómo hacer un igloo en el Valle de Chistau, en España.