Villarejo de Salvanés es un pueblo madrileño lleno de historia y con uno de los castillos más originales que habréis visto nunca. Está a unos 50 km del centro de Madrid (más abajo tenéis un mapa), en el sureste de la comunidad.

Hace unos días, una mañana de sábado en que no teníamos plan, se nos ocurrió que era una gran ocasión para conocer en familia ese castillo que teníamos ganas de ver de cerca desde hace tiempo. Pasamos el día en Villarejo y descubrimos que su patrimonio no es sólo ese famoso castillo, sino que es mucho más amplio. Los chicos se lo pasaron bien y, para comer, tomamos tapas en La Tercia, un pequeño bar restaurante coqueto y de trato familiar situado en la plaza del pueblo.

Por qué hay un castillo en Villarejo de Salvanés

Esta fue una de esas poblaciones fundadas para ir asegurando el territorio que se reconquistaba a los musulmanes. Su origen se remonta al siglo XII y fue la orden de Santiago la encargada de asentarse aquí y asegurarse de que la zona se repoblaba con cristianos.

Villarejo de Salvanés está situado en un promontorio desde el que era más fácil controlar la posible llegada de enemigos y por eso también es un lugar idóneo para construir un castillo. Ya os hemos dicho que su silueta es muy original, pero es que, en realidad, lo que queda no es todo el castillo sino sólo la torre del homenaje.

Esa torre, la principal del castillo, la más grande, la que sirve para guardar las armas y para proteger a los habitantes de la fortaleza, es normalmente cuadrangular (así es en castillos como el de Belmonte, cercano a este). En el castillo de Villarejo de Salvanés, sin embargo, cada arista y cada lado de ese cubo tiene un semicilindro adosado (un cubillo se llama) y, en conjunto, da la impresión de ser una gran torre de diseño muy particular.

Visita al castillo

Ahora se entra por un acceso que no es el original (y que da acceso a la oficina de Turismo del pueblo, magníficamente atendida, como pudimos comprobar durante nuestra visita). Antes, la puerta de acceso estaba a varios metros del suelo y se entraba con una escalera de mano que, si venían atacantes, se metía dentro, dejando el acceso fuera del alcance de los enemigos.

Hay un gran cartel donde puedes ver cómo era el castillo completo en su época, rodeado de su muralla y foso, con sus torres en las esquinas y, sí, con su torre del homenaje, que es la que ha llegado hasta nuestros días. Así que lo primero que hay que hacer al acercarse es dar una vuelta alrededor, comprobar los restos que aún perviven e imaginarse lo grande que era en la Edad Media.

Por dentro, tiene cuatro pisos y alberga un museo de la historia de Villarejo de Salvanés. Merece la pena subir por la escalera de caracol y llegar hasta la terraza, en lo alto de la torre, desde donde se divisan todos los campos de alrededor.

Horario del castillo de Villarejo

El castillo está abierto, de forma habitual, con los siguientes horarios:

• Sábado y domingo: de 11:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00
• De miércoles a viernes es necesario cita previa

Además, se pueden concertar visitas cualquier otro día mandando un mail a  reservas@turismovillarejodesalvanes.com o llamando al 627 931 034.

Podéis encontrar más información y estar al tanto de las actividades que organizan para niños (suelen hacer visitas teatralizadas) en la web de la Oficina de Turismo de Villarejo de Salvanés (https://www.turismovillarejodesalvanes.com/index.php)

Qué más ver en Villarejo de Salvanés

No creas que en Villarejo sólo podrás visitar el castillo: este pueblo fue el más próspero de la comarca hace siglos. Se situaba en el punto de confluencia de varias rutas comerciales y de comunicación y su importancia estratégica y militar queda demostrada porque aquí tuvo su centro neurálgico la orden militar de Santiago.

La Tercia: administración de la Orden de Santiago

Su maestre vivía en una casona que hoy se conoce como La Tercia y que también se puede visitar, aunque está convertida en un centro de exposiciones. En su bodega hay un Museo Etnográfico donde se dan a conocer las labores tradicionales agrícolas relacionadas con la llamada tríada mediterránea (cereal, vid y olivo).

Edificios religiosos

Si os gustan los edificios religiosos, en Villarejo hay una iglesia parroquial, la de San Andrés, en la plaza mayor y a pocos metros del castillo, y el gran Santuario de Nuestra Señora de la Victoria de Lepanto, con convento incluido, también muy cerca.  

Ambos tienen que ver con lo militar y defensivo y ambos remontan su historia al siglo XVI. La iglesia de San Andrés es una construcción del tipo templo fortaleza, un poco mazacote, pero bonita por dentro (merece la pena entrar y echar un vistazo).

El santuario, por su parte, fue levantado por Luis Requesens, lugarteniente de don Juan de Austria en la batalla de Lepanto, quien hizo la promesa de construirlo si las tropas cristianas vencían. Como ganaron y él fue maestre de la Orden de Santiago en Villarejo de Salvanés, levantó aquí su santuario.

Museo del Cine de Villarejo

Otra de las sorpresas es el Museo del Cine Profesional y Tecnológico, el primero de Madrid y de España, propiedad de una familia que poseyó varios cines en esta zona y en el que hoy —previa llamada para concertar la visita— se puede conocer una gran colección de proyectores y todo tipo de maquinaria, utensilios y carteles de la historia de la cinematografía.

Fotos de Villarejo de Salvanés

En esta galería de fotos podéis ver algunas imágenes de nuestra ruta por este pueblo madrileño, que nos sorprendió gratamente 😉

Dónde están Villarejo de Salvanés y su castillo

El castillo está en el centro, junto a la Plaza de la Constitución y no tiene pérdida posible. Se llega por la A-3, la autovía de Valencia, y está en el kilómetro 50. En este mapa podéis comprobar su ubicación exacta.

El castillo de Villarejo de Salvanés está muy restaurado, pero conserva elementos originales y, si preguntáis, os contarán cómo eran y a qué correspondían en el plano original.