Una visita muy divertida de hacer con niños en Conil de la Frontera es la que organiza el Centro de Iniciativas Turísticas de Conil de la Frontera (que organiza interesantes rutas por Conil), en Cádiz, para subir al campanario de Santa Catalina. No es peligroso, nosotros hemos hecho esta visita acompañados de nuestros tres chavales (el menor, de 8 años) y con un sobrino de 5. Por supuesto, hay que tener cuidado y estar pendiente de ellos, pero no más que en cualquier otro momento.
La visita está contada por un guía muy divertido, con el gracejo de Conil, y cuesta sólo 3 euros; los niños no pagan nada. Incluye la explicación de la iglesia, sus imágenes, sus capillas, el significado de todo ello para la gente de Conil a lo largo de su historia y, lo mejor de todo, la subida al campanario poco antes de las doce.
La iglesia, con la advocación de Santa Catallina, tiene en el altar mayor una pequeña talla de Nuestra Señora de las Virtudes, patrona de Conil. Se trata de una de esas vírgenes llamadas “de cabalgadura”, que acompañaban a los nobles cuando realizaban un viaje, como forma de protección ante las vicisitudes que en épocas medievales acarreaba desplazarse de un lugar a otro. Al llegar sanos y salvos al destino, estos viajeros solían donar la imagen, acompañada de ciertos dineros para construir una capilla o similar.
En la iglesia de Conil existe también una figura de Santa Catalina, en una de las capillas laterales, y un precioso Cristo de cuerpo entero, con el torso desnudo, cuya fama de guapo (así lo cuenta el guía) es tal, “que las beatas lo llaman el Ronaldo y es el que más devotas tiene en todo el pueblo”.
En la planta superior, se accede al órgano, restaurado pero que conserva toda la estructura original y, por una portezuela, al techado de la iglesia, plano y accesible, desde el que se pueden divisar maravillosas vistas del pueblo y sobre todo de la costa hacia el sur (Barbate, Caños, casi hasta Trafalgar). El organista obsequia a los visitantes con una pieza tocada en directo (que el día de nuestra visita no pudimos disfrutar por hallarse el músico en Sevilla). De allí, a través de una empinada escalera, se llega al campanario, con 4 campanas, cada una de un artesano distinto, cuyo son está ya automatizado (no hay monaguillos que tengan que tirar de la típica cuerda). Allí se sube poco antes del mediodía para que, cuando todos los visitantes están aposentados, las campanas empiecen a sonar y, una de ellas, incluso a voltear. Es toda una experiencia, con los campos de esta tierra al fondo y, al otro, el mar azul inmenso.
Fotos: el campanario de Santa Catalina, en Conil
Os dejamos algunas fotos de nuestra experiencia en el campanario de Conil de la Frontera:
A nuestros hijos, y a nosotros, a todos nos encantó y os aconsejamos que, si vais a Conil de la Frontera, no dejéis de hacer esta visita.
En resumen… visita al campanario de Conil
Qué: visita al campanario de la iglesia de Conil de la Frontera
- visita de la iglesia
- subida al campanario para escuchar las campanas
- pieza musical del órgano de la iglesia tocada en directo
- Cuándo: los martes a las 21.30h
- Cuánto cuesta: 3 euros, niños gratis
- Cómo reservarla: llamando al 633 493 827
- Más información: turismo-conil.com