
Durante el confinamiento por la crisis del coronavirus, parece que hemos «retomado» el gusto por esos pequeños placeres cotidianos que, a pesar de que antes del coronavirus podíamos disfrutarlos sin limitaciones, el «encierro» en las grandes ciudades les ha conferido un grandísimo valor 😉 Y quizá ahora, después del coronavirus, se nos ocurra disfrutar de estos planes como nunca antes lo habíamos hecho…
La luz del atardecer tiene siempre algo mágico… quizás ese rayo verde, el último que dicen que se ve antes de que el sol se oculte del todo (esto se lo conté a mis hijos y me miraron con cierta preocupación 😉 Para ver cómo se oculta el sol hay que situarse en un lugar alto, que normalmente domina una gran perspectiva y desde el que se tiene una visión de la ciudad, en este caso Madrid, muy diferente a la habitual. Eso ya resulta atractivo incluso para los chavales.
En Madrid, y para que los disfrutes con tus hijos, te recomendamos cinco atardeceres cuya visión puedes combinar con un paseo, una visita arqueológica, un refresco, una merienda… o a palo seco, que todo es posible. Si conocéis otros igual de mágicos, dejadnos un comentario en este post.
Cerro del Tío Pío

En un lugar insospechado, fuera de las rutas turísticas habituales, increíble visión de un Madrid ancho ancho…
Parque del Oeste

En el corazón de la ciudad, junto a un antiguo templo egipcio, con la Casa de Campo también al fondo.
Las Vistillas

El más castizo, junto al Viaducto, enfrente del Palacio Real y la Almudena, en lo que fue el Madrid medieval.
Terraza del Círculo de Bellas Artes

Un balcón en el cielo, con música chill out y los más variopintos personajes, según la hora, claro.
Rincón Gourmet

Un mirador acristalado, con vistas urbanitas pero aun así desconocidas, acompañado de un fino bocado y de una bebida especial.
Fotos de 5 atardeceres en Madrid, con niños
Aquí compartimos algunas fotos más de estos atardeceres para que elijas uno, dos o todos los atardeceres inolvidables para disfrutar en familia 😉
Éste es un plan tranquilo y relajado, muy práctico para «bajar el ritmo» de los peques después de recorrer Madrid en GoCar, o de hacer un tour por Madrid en Scrooser, ¡pruébalo!