En la situación de confinamiento en casa que vivimos durante la primavera de 2020 por la crisis del coronavirus tuvimos que buscar entretenimiento con cualquier excusa, y ya que no podíamos salir a hacer compras… montamos un centro comercial en casa…
A los peques les encanta jugar a ser mayores y tomar decisiones con respecto a lo que compramos y cómo gestionamos el pago de lo que consumimos suele resultarles atractivo (piénsalo: seguro que cuando has ido al súper con los peques en más de una ocasión se han peleado por pagar…). Pues para recordarles esas costumbres sociales y para trabajar con los peques la negociación y el acuerdo, vamos a simular una tarde de compras en casa.
Jugando a las tiendas, el «vendedor» tendrá como objetivo «vender» el mayor número de objetos posibles y el «comprador» tendrán como objetivo conseguir ofertas ventajosas 🙂
El juego es muy sencillo y, por experiencia, os podemos adelantar que es muy resultón 🙂 Se trata de que el peque (o los peques) simule una tienda en una habitación de la casa. La tienda puede ser «temática» (una zapatería o una tienda de alimentación, o el puesto para vender nuestra artesanía casera o nuestras confecciones) o un bazar (donde habrá de todo). Como única condición, la tienda tiene que tener todo lo necesario para poder vender, o sea, artículos a la venta, como es obvio, y un puesto de cobro.
Una vez esté montado el establecimiento, otro jugador deberá hacer de cliente; como cliente, el jugador podrá hacer todo tipo de preguntas sobre los artículos a la venta e intentar negociar el mejor precio para cada uno de ellos, y el vendedor podrá proponer nuevas ofertas para intentar vender el mayor volumen de productos posible. Sin más.
El objetivo del juego no es ganar más o menos «dinero» (podemos usar monedas de verdad, dinero de juguete o legumbres), sino practicar las relaciones sociales basadas en la negociación y el acuerdo. Este juego es muy común cuando los niños se encuentran en el parque con otros niños: juegan a las casitas, negocian el intercambio de juguetes… en definitiva, asumen diferentes roles para conseguir diferentes objetivos, y ese aprendizaje es el que intentaremos mantener con este juego en casa.
Máster en canto comentó:
Que divertido