El 22 de abril se celebra el Día de la Tierra, y el 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, sendas jornadas de reivindicación de la protección del Medio Ambiente y ahorro energético en la que se promueven campañas de comunicación, de educación y de conservación para la protección del Planeta.
Sin embargo, no solo hay que intentar reducir la contaminación en fechas puntuales, claro, y la escalada del precio de la luz nos invita a intentar reducir su consumo para intentar «bajar» ese precio… veamos cómo.
Día de la Tierra y Día del Medio Ambiente
El Día de la Tierra (o del Planeta) se instauró para crear una conciencia común sobre los problemas de que la población mundial ha provocado en el Medio Ambiente en que vivimos, (o sea, en nuestro planeta), como la contaminación, la pérdida de biodiversidad y otras preocupaciones ambientales para proteger la Tierra.
El 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, una jornada establecida por la Asamblea General de Naciones Unidas en 1972 para conmemorar un día que hace referencia a los temas medioambientales y cuyo objetivo es concienciar a la población sobre su cuidado.
Para que los peques puedan contribuir a la conservación del Medio Ambiente y al ahorro de energía y participar de lleno en las jornadas universales de protección del Medio Ambiente y de la Tierra, os vamos a proponer una serie de actividades en las que vamos a reducir al máximo lo que cada uno contaminamos, ¿te apuntas a nuestro día «sin»?
Planeamos el Día «sin» por nuestro Planeta
Para planear nuestro Día «sin» por la Tierra, los peques tendrán que ir anotando todas aquellas actividades contaminantes que llevamos a cabo día a día para intentar reducirlas al máximo en el Día del Planeta. Si se lo propones como un juego y le asignas el papel de «doctor(a) Planeta» (si hay más peques puede haber también «poli Planeta» o «inspector(a) Planeta«, seguro que se lo toma en serio 🙂 Haz que los peques lleven, durante varios días, un registro de los electródomésticos que usáis y durante cuánto tiempo (más o menos), los productos de limpieza o de higiene personal y la cantidad (en tapones, por ejemplo), los plásticos de un solo uso (fundamentalmente, envases o bolsas), o cualquier otra acción que conlleve contaminación de cualquier tipo (más abajo encontrarás las referencias).
Cuando «doctor(a) Planeta» haya completado su inspección podrá programar la reducción de todas las actividades contaminantes de la familia que llevaremos a cabo en nuestro Día «sin» por la Tierra.
Día «sin» contaminación
La separación de residuos para facilitar el reciclaje, apagar la luz cuando no la estemos usando, cerrar el grifo mientras nos enjabonamos las manos, o, incluso, ir caminando al cole son actividades que pueden hacer los peques para contribuir a la conservación del Planeta pero, ¿pueden… podemos hacer algo más? Vamos a ver…
Día sin plásticos
Ya empiezan a desaparecer de todos los comercios de la Unión Europea un montón de artículos de plástico de un solo uso en forma de
- cubiertos (cucharas, tenedores, cuchillos y palillos),
- platos de plástico,
- pajitas,
- bastoncillos para los oídos,
- palitos de plástico para sostener globos, y
- plásticos oxodegradables (principalmente, bolsas de la compra) y contenedores alimenticios y tazas de poliestireno (“oxodegradables” están incorporados, habitualmente, en los plásticos convencionales como el polietileno (PE), el polipropileno (PP), el poliestireno (PS), el polietilentereftalato (PET), e incluso, a veces, el polivinilcloruro o PVC).
Para obedecer a esta normativa y no hacernos un lío con todos estos materiales (el PET, el PVC, el PE…), ¿qué te parece si evitamos usar cualquier objeto de plástico que después tuviéramos que tirar?, si lo piensas, no será tan difícil… en casa tenemos vasos de cristal, botellas de vidrio y bolsas de tela… seguro que encuentras sustitutos para todos estos. Si vamos a hacer una compra (online o presencial) evitaremos todos aquellos productos envasados en plástico si encontramos un sustituto con otro tipo de envase.
Día sin vertidos
Este reto va a ser, quizá, algo más difícil de cumplir, pero seguro que podemos conseguirlo si pensamos en equipo 😀 Lo que vamos a tener que hacer, principalmente, es reducir el volumen de productos de limpieza e higiene que empleamos (ten en cuenta que mayor cantidad no significa una mejor limpieza) y que terminan vertiéndose por los sumideros del lavabo, la ducha o el inhodoro, y procurar utilizar aquellos productos menos contaminantes, como el jabón natural o sólo la cantidad de champú necesaria a la hora de la ducha (hoy no toca jugar con la espuma :-D).
Día sin emisiones
Esta acción la tenemos todas muy clara… hay que intentar no coger el coche a no ser que éste sea eléctrico 🙂 Sin embargo, los adultos debemos coger el coche para cualquier gestión ineludible; en estos casos habrá de hacerlo con cuidado, procurando mantener el motor encendido el menor tiempo posible.
Día sin electricidad
Sin duda, éste será el reto más difícil para los peques… y para los mayores, porque tendremos que reducir a la mínima expresión el consumo de electricidad. ¿Que cómo lo haremos?, presta atención…
- Desenchufa todo lo desenchufable: apaga la tele, el ordenador la lámpara de pie… y desenchufa de la pared todos aquellos electrodomésticos que no estés usando (ojo: no desenchufes la nevera, por ejemplo, o la vitrocerámica, que la necesitarás para cocinar). Si tienes que trabajar, estudiar o teletrabajar con el ordenador, recuerda apagar el monitor cada vez que te levantes a hacer un descanso.
- Pon el teléfono en «modo sin»: si tienes una línea de teléfono fija, puedes apagar el móvil, directamente; si no, puedes desconectar el Bluetooth, la Wi-Fi y los datos para dejar el dispositivo sólo para enviar y recibir llamadas y reducir, así, el consumo energético del móvil. Por supuesto, esta «regla» hay que aplicarla también a la tablet 😉
- Aprovecha la luz natural. Esto es relativamente fácil: no enciendas la luz salvo que sea estrictamente necesario. Sube las persianas, abre las cortinas, salte a leer o estudar al balcón o a la terraza… y por la noche… vamos a alumbrarnos con velas de cera o con una linterna (mucho mejor si la linterna es de dinamo y funciona sin pilas). Esto último de la linterna les encantará a los peques, ¡ya verás!
- Cuenta historias en lugar de que te las cuenten: el ratito de ver la tele después de hacer los deberes o antes de dormir podemos sustituirlo por un ratito de contar historias… en lugar de que nos las cuenten.