
En nuestras vacaciones estivales en la costa de Cádiz en familia no sólo solemos disfrutar de las maravillosas playas gaditanas, sino que nos gusta movernos para descubrir las costumbres y la cultura de la zona, haciendo pequeñas excursiones a pueblos o lugares con interés para nuestros hijos… y para nosotros mismos 😉
Jerez de la Frontera es una población gaditana que merece la pena visitar sí o sí, pero, si uno va con niños, no hay que perderse la visita en tren por las instalaciones de las Bodegas Tío Pepe. En realidad, la marca Tío Pepe, archiconocida por su logo publicitario, una botella con sombrero cordobés que ha presidido años y años uno de los lados de la Puerta del Sol de Madrid, es una marca de González Byass, los dueños de las bodegas, como lo son Soberano o Lepanto, por citar dos de sus brandis más populares.

El interior de las bodegas es un verdadero conjunto histórico artístico, pero, sobre todo, está lleno de anécdotas y curiosidades que a los niños les encanta.
Cuando uno entra en el recinto, después de comprar la entrada, te hacen esperar unos minutos hasta que se forma el grupo total de visitantes, al que hacen subirse en el tren para iniciar el recorrido.

La visita dura en total como una hora, aunque eso también depende de la gracia y lo animado que esté ese día el guía de turno. Se van viendo tanto los jardines y viñedos como los edificios, el interior de las bodegas, los utillajes, etc..
Los edificios son la Real Bodega de La Concha, diseñada por Gustave Eiffel; Los Apóstoles, donde están las botas (barriles, para entendernos) de 12.000 litros e incluso una de 33.000 litros conocida como la bota del Cristo; La Constancia y Los Reyes, en la que se almacenan montones de botas firmadas por personajes célebres de todos los sectores de la sociedad, de las artes, las letras, las ciencias… Aquí siempre se detienen un buen rato, porque a todo el mundo le gusta leer e identificar a esos personajes, desde el Rey a Fernando Alonso pasando por Orson Wells, Steven Spielberg, etcétera.

Para conocer este pueblo gaditano en su conjunto, puedes planear una excursión a Jerez de la Frontera desde El Puerto de Santa María o desde Cádiz, y recorrer, en familia los monumentos y enclaves más reconocidos.
Los ratones de Jerez
En La Constancia es donde se puede ver una curiosidad fantástica: los ratones catadores de vino. Como parte de la visita se ven varias fotografías en las que unos ratoncillos parecen estar bebiendo de unas copas típicas de Jerez subidos en unas escalerillas de madera apoyadas contra unas copas por las que la guía nos contó que subían los ratones aún hoy en día, como demuestran las fotos.

La historia es protagonizada por Pepe Gálvez, un capataz que trabajó en estas bodegas como venenciador (los operarios que sacan el vino de las botas y lo sirven con la venencia, el cacillo de mango largo que introducen en el barril para luego servir el vino en la copa sin dejar caer ni una gota).
En los descansos de su trabajo, mientras comía, unos ratoncillos se le acercaban y se comían las miguitas que se le caían. Poco a poco, día a día, este buen hombre se fue haciendo amigo de los ratones, a los que daba trocitos de su comida para atraerlos. No contento con eso, empezó a dejarles probar el vino, que a los roedores debió de gustarles, porque volvían a por más.
Al final, el buen Gálvez empezó a ponerles obstáculos –según él, para que los ratones se ganaran el vino que se bebían– y les puso una pequeña escalera apoyada en una copa para que tuvieran que subir por ella. Incluso empezó a amaestrarlos un poco enseñándoles pequeños saltos y bailecillos. Se ve que los ratones se emborrachaban, se hicieron quizás alcohólicos, y hacían lo que fuera por seguir bebiendo (esto es interpretación nuestra, no lo cuenta la guía). El caso es que la historia se ha hecho famosa y te la cuentan como parte de la visita.
Museo Tío Pepe

En cierto punto del recorrido, se visita el museo del Tío Pepe. Una gran parte de los objetos expuestos son carteles con las campañas publicitarias de más éxito, acompañados por documentos fundacionales, fotos históricas con grandes personajes y, una de las cosas que más nos llamaron la atención, restos recuperados tras el incendio de finales del siglo XX. En la galería de fotos que tenéis en este post podéis ver un teléfono de la época completamente derretido.
Al final del recorrido, hay una degustación de vino con algo de picar (un poco de queso y embutido) y el paso por la tienda por si alguien quiere adquirir alguno de los caldos que tienen a la venta.

A nuestros hijos les gustó mucho esta visita, todavía nos reímos y comentamos lo de los ratones. Si estáis por Cádiz, os la aconsejamos, porque Jerez está bien comunicado y, estés donde estés, te puedes acercar.
Otra escapada interesante para unas vacaciones con niños en la provincia de Cádiz es esta excursión a Vejer y Conil disponible desde la ciudad de Cádiz o desde El Puerto de Santa María.
Fotos de la Bodega Museo del Tío Pepe, en Jerez
En esta galería de fotos compartimos algunas instantáneas de nuestra visita al Museo Tío Pepe de Jerez de la Frontera, hace ya algunos años:
Dónde están las bodetas del Tío Pepe en Jerez
En este mapa os marcamos la localización exacta de este emblemático museo del vino de Jerez:
Horarios y precios de las bodegas del Tío Pepe
Los horarios de las visitas son diversos según el día de la semana, lo mejor es que consultéis directamente en su web, sobre todo en tiempos de coronavirus, por si cambian las condiciones para la visita. En este enlace puedes ver horarios y precios para la visita a las Bodegas Tio Pepe de Jerez de la Frontera.