¿Hablan los árboles? ¿Se comunican? ¿Sienten miedo? Y tú… ¿conoces sus nombres? ¿Sabes diferenciar unos de otros? En la película documental La Vida Secreta de los Árboles se nos descubre el mundo de esas plantas maravillosas que llevan en el planeta mucho más tiempo que nosotros. Y el narrador de esta historia es un alemán ya famoso por sus libros sobre árboles y sobre la naturaleza en general: Peter Wohlleben.

Un documental curioso y atractivo

La personalidad de este guardabosques alemán es la que hace entretenido este documental, porque todo se ve a través de su historia, de su vida, de su trabajo diario, de lo que él ha sentido junto a esos árboles de los que habla. El estudió Silvicultura y ejerció durante casi 20 años, hasta que se dio cuenta de que no era feliz, porque en realidad estaba trabajando más para la industria relacionada con los árboles que para garantizar su existencia y dar a conocer su importancia para el ser humano.

A partir de ese momento, dimitió de su puesto y se dedicó a escribir libros sobre la naturaleza y el mundo de las plantas. Uno de ellos, el que hacia el número 16, tuvo un éxito mundial: La vida secreta de los árboles.

Ya sabemos que la palabra “documental” no suele asociarse a algo divertido, sino a un tostón ideal para echarse la siesta con la televisión encendida. No, no, hay que huir de ese estereotipo: cada día hay más creaciones audiovisuales que nos enseñan, nos conciencian, nos abren nuevas perspectivas utilizando los recursos de las grandes y taquilleras películas de entretenimiento.

Los árboles padres y los árboles hijos

La Vida Secreta de los Árboles recoge la sospecha inicial de que existe comunicación entre los árboles. Seguro que habéis oído que las plantas son sensibles a la música y que crecen más y mejor cuando cada día pueden “escucharla”. En los árboles, se produce comunicación en forma de intercambio de nutrientes, en la forma en que un árbol madre protege a un retoño.

Sí, hay árboles madre e hijo que se apoyan mutuamente: la copa se extiende sobre los hijos, para que el sol no los agoste, los pequeños son alimentados, por así decirlo, por las raíces del progenitor… ¿A que no lo sabíais?

Esta película, se adentra en los árboles, en la corteza, en el suelo del bosque donde viven miles de organismos, en las copas de los árboles, y los muestra también desde arriba, con impresionantes imágenes tomadas por drones.

También se habla de los porqués de la industria maderera, de los incendios y si es bueno reforestar después o es mejor dejar que el propio bosque se autoregenere. Y cada cosa la cuenta este exguardabosques salpicando todo lo que cuenta con anécdotas e imágenes de su vida actual como activista medioambiental: dando conferencias, hablando en los medios de comunicación, organizando visitas guiadas, hablando con los niños, participando en manifestaciones.

Los padres estamos cada vez más preocupados por el mundo que van a heredar nuestros hijos. Ya sabéis, no hay planeta B, así que debemos cuidar nuestra Tierra y, en eso, los niños tienen mucho que decir y que aprender. Llevadlos a ver esta película, es un primer paso para que se interesen por ir un poco más allá y recuperar un conocimiento que el mundo rural aún conserva, pero que hemos perdido con la vida urbana. Sed sinceros: ¿cuántos nombres de árboles conocéis? ¿Cuántos árboles podéis reconocer?